Víctor Bugge, la historia viva de la fotografía presidencial: «Me considero un puente entre mi cámara y la gente»
Víctor Bugge, el fotógrafo que trabaja en la Casa de Gobierno hace casi cincuenta años, tuvo la tarea de retratar a absolutamente todos los presidentes democráticos: desde Raúl Alfonsín hasta Mauricio Macri… y ya se prepara para hacer lo propio con Alberto Fernández desde el martes que viene. «Voy hacer todo lo posible por tener una foto que defina al traspaso de mando que va a ser bastante emblemático», anunció.
«No soy de los que invaden ni convoca a una imagen. Ellos saben que estoy, pero trato de no armarla porque estaría haciendo la fotografía oficialista», contó en diálogo con AM 1300 La Salada.
Si bien reconoció que no le gusta hacer un montaje, contó que la única oportunidad en la que hizo una solicitud a un mandatario fue en la asunción de Cristina Fernández: «Le pedí que se siente en el sillón porque era la primera mujer presidenta».
Más allá de haber visto pasar numerosos mandatarios por la Casa Rosada, transitó las noches más oscuras de la historia reciente del país con la renuncia de Fernando de la Rúa y las manifestaciones sociales que se dieron en todos los alrededores.
Además, realizó numerosos viajes y fue testigo de las visitas de presidentes extranjeros y estrellas internacionales del mundo del deporte y el espectáculo.
«Yo me acuerdo que la noche que vino Obama, Mauricio Macri me preguntó qué recordaba del viaje de Bill Clinton con Carlos Menem y le dije que lo hizo bailar el tango. Creo que el Presidente hizo uso de mi experiencia, vino Mora Godoy y, de repente, ella suelta a su compañero de baile y lo toma (al mandatario estadounidense). Tengo la misma foto de Clinton y Obama bailando el tango», rememoró.
«Me considero un puente entre mi cámara y la gente. No quiero perder eso», confesó en diálogo con Rosanna González y Romina Monfrinotti en ‘La Vuelta con Vos’. «Una forma de proteger mi laburo es que inmediatamente lo tenga todo el mundo: en mis manos tengo una herramienta», dijo.
«Soy un agradecido del reconocimiento de todos mis colegas. No tengo palabras. Todo el mundo reconoce el laburo mío. Quizás me sirva para seguir adelante, no bajar los brazos», valoró.
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