La nieta de Lía Crucet denunció por abuso sexual a ex ‘Soñando por Bailar’

Malena Rosario González, nieta de la popular cantante Lía Crucet, eligió ‘El Show del Espectáculo’ por AM 1300 La Salada para relatar el hecho de acoso que vivió la semana pasada por parte de José María Gómez, ex participante de ‘Soñando Por Bailar’ conocido como ‘El Carni’.

De acuerdo a lo que contó en diálogo con Ulises Jaitt, la joven de 23 años radicó la denuncia por abuso sexual el 10 de enero en la Comisaría de la Mujer y Familia de Vicente López luego del hecho que ocurrió en el restaurante ‘Aquiles’ de Villa Martelli, propiedad del ex mediático.

“Me entero cuando hice la denuncia que este chico tenía que ver con la isla del ‘Soñando por Bailar’”, relató al hacer referencia al pasado televisivo de su jefe. “Estaba trabajando en el bar de moza porque quería juntar plata para una producción nueva. Me gustaba el laburo, eran todas compañeras re bárbaras. A mí me contrato el encargado”, comenzó a contar sobre su llegada a ese puesto.

“Mi horario era de 16 a 2 AM y un día antes me había dicho que vaya a las 11 para atender un evento grande. Cuando llego al lugar, me entero que estaba yo sola con él arriba. Como estaba empezando no podía decir que no. Cuando llegue no estaba la otra chica que iba a trabajar conmigo. Estábamos los dos y en un momento me dice: ‘Male, haceme un favor. Pasa un trapito en el espejo del baño de hombres’. Yo fui y lo veo que estaba orinando. Me empezó a hablar como algo natural. Sentí vergüenza ajena y me fui del baño al ante baño. Cuando me pongo ahí, viene, me agarra de la cintura y me dice ‘que bien que trabajas, me encanta’”, relató.

-¿Qué hiciste en ese momento?

-Me quedé helada. No sabía qué hacer. Él sale. Tenía el celular y las lleves del auto en la barra. En un momento se va, atendemos el evento, continúo con mi turno, comí con las chicas ya las 20 me siento a comer y viene el encargado a decirme que entre a la oficina de José por un tema de sueldo. Me pareció raro. Le pregunté si no podía esperar a que terminé de comer porque venía trabajando de las 11 de la mañana. El encargado me deja con José sola: sale del baño abrochándose el pantalón. Yo no sabía dónde mirar. Otra vez lo mismo. Me dijo ‘vení, acercate’ y que no me siente. Me preguntó si hacía deportes: ‘viste el lomazo que tenes’. ‘Acercate, sacate el faldón un minuto’.

-¿Le hiciste caso?

-Hay que estar en esa situación. Por momentos empece a sentir que se estaba pasando de la línea. La mujer estuvo ahí toda la tarde. Me lo sacó y lo dejó ahí cerquita. Viene y me dice ‘tenes unas nalgas enormes, permiso te voy a acomodar la camisa’. Me mete adentro del pantalón la mano y me toca toda la cola. Ahí los ojos se me llenaron de lágrimas, me abroché rápido el faldón y me dijo que al otro día vaya de nuevo a las 11 porque ‘te lo ganaste’.

-¿Hace abuso de poder?

-Sí, totalmente. Cuando voy al baño otra moza me abraza y me dice que lo mejor que podía hacer era irme porque si me quedaba, iba a pensar que me gustó. Otra que ‘esa manía no se le va más’ y de hecho hay algunas compañeras que salen con él.

-¿Vos hiciste la denuncia el mismo día?

-Si, a la noche. Fui a la comisaría porque me iba a atender una psicóloga y no estaba porque tenía un problemita. Es como que todo queda en la nada y él queda con su restaurant haciendo lo mismo con las chicas y yo me quedé sin trabajo. Es una locura. Como que la mejor parte se la lleva él.

-¿Lo hablaste con tu mamá o con alguien más?

-Con mi mamá, mi hermana y por último a mi papá y mis hermanos. Cuando vuelvo a casa mi mamá lo llama al local, le dijo que era mentira que había entrado a la oficina y al final termina diciendo que nadie me obligó.

-¿A tu abuela Lía?

-Ella tiene esquizofrenia desde que tenía 14 años y antes del 24 de diciembre está mal de salud. Te llama todo el día, te dice que le pasaron cosas, después que es mentira. Está con un brote. También con el tema del marido que se está separando. Por ahora no sabe.

-¿Él es el único dueño del restaurant o hay otro?

-Sí, no sé quién es.

-¿Se enteró de que lo denunciaste?

-Me parece que no sabe nada. Salí de ahí, fui a la casa de mi mamá, me di un baño y fui a hacer la denuncia.

-El encargado sería el cómplice, ¿cómo se llama?

-Jonatan Ramos, es de Venezuela. Es un peón de él. Cuando salgo de la oficina, que me temblaban las manos, le dije que tenía que hablar con él. Como está lleno de cámaras me dijo que le hable de lejos porque no quería que me vean hablando con él. Le conté y dijo que no lo podía creer y que pensaba que era un tema de sueldo. ‘Él se habrá confundido, se habrá pensado que eras como todas las chicas. Lo que pasa es que acá en Argentina se manejan todos así’, me dijo.

-¿Cómo lo definís a José María Gómez?

-Me parece un chabón soberbio, arrogante que se siente como un rey ahí adentro. Se hace el mandamás. No lo traté mucho tampoco. Fue un día solo el que estuve con él que fue el día que renunció. La mujer estuvo todo el día ahí, se fui y me mandó a llamar. Él me mandó un mensaje en donde me pone ‘que linda que sos’ y un audio en donde decía ‘me mató ese tatuaje que tenes en la cintura’.

-¿Iban famosos a este lugar?

-Va Jorge Macri, fue Andy Kusnetzoff.

-¿Tenes miedo de que te pase algo?

-Cuando él se entere va a querer hacer algo o atentar contra mí.